
Por más sencillo, que pretenda serlo, está poniendo en juego su seguridad física y en serios aprietos a su equipo de seguridad.que le acompaña.
Los gobiernos democráticos, tienen sus debilidades y no todas la medidas tomadas, satisfacen a todo el conglomerado social, por lo que elementos de la sociedad, no toleran, pero tenemos lo que en criminologia, conocemos como la psicología criminal.
Este razonamiento, logico y natural , donde todos los escenarios de la vida en la sociedad, han cambiados y con ellos los males sociales tratan como el narcotráfico, el lavado de activos y otros, apoderarse para obtener presencia de mando en estructuras del poder.
Todo ello, conlleva a que la psicología criminal del hombre, sin sentido común, tienda a comportarse de manera errática y fuera de todo parámetro de buena convivencia, por lo que es necesario poner candado antes que nos roben.
Esa psicologia criminal, no juega, cuando sus interés son tocados. La seguridad de un presidente, no tiene amigos, no tiene familia y no tiene ojo para actuar.