
Por Luis Ramón López
SANTO DOMINGO.-El inicio del juicio contra los implicados en el denominado caso SENASA , se ha convertido en uno de los mayores retos para el sistema de justicia dominicano, en medio de una alta expectativa social y del reclamo de diversos sectores que exigen sanciones ejemplares ante lo que se investiga como un presunto desfalco de recursos destinados al sistema de salud.
El proceso judicial se desarrolla bajo la atenta mirada de la población, organizaciones sociales, gremios profesionales y actores del ámbito político, quienes consideran que este caso pone a prueba la capacidad del Estado para garantizar transparencia, rendición de cuentas y protección de los fondos públicos, especialmente aquellos dirigidos a un área tan sensible como la salud.
Para amplios sectores de la ciudadanía, el caso SENASA simboliza una deuda pendiente con los afiliados más vulnerables del sistema, por lo que reclaman que la justicia actúe con firmeza, independencia y respeto al debido proceso, pero también con la severidad que establecen las leyes cuando se comprueban responsabilidades penales.
Juristas y analistas coinciden en que el desenlace de este juicio marcará un precedente importante en la lucha contra la corrupción administrativa, al tratarse de recursos que, según las acusaciones, estaban destinados a garantizar atención médica y bienestar a miles de dominicanos.
La sociedad dominicana espera que el proceso se lleve a cabo con total transparencia y que las decisiones que emanen de los tribunales contribuyan a fortalecer la confianza en las instituciones y a reafirmar el principio de que los fondos públicos, especialmente los destinados a la salud, deben ser protegidos sin excepción.