Por Luis Ramón López (perodista.l.r@hotmail.com)

VILLA TRINA, Moca.- Sectores e instituciones de la provincia Espaillat,  que defienden y protejen los recursos naturales, denunciaron la tala indiscriminada de arboles en una gran franja de la cordillera Septentrional, lo que pone en peligro la superviviencia de especies de aves, pájaros y de otros animales perennes de la zona.

Acusan a gentes de poder económico y político de ser los responsables de ese crimen contra la madre naturaleza, en campos como Pozo de Palma, Palma Herrada, Rancho Los Plátanos, Jamao Afuera, el Sálitre, Juan López, Los Naranjos, La Cumbre , San Victor Arriba y zonas aledañas al pico El Mogote.

Alegan que esta situación está generando un desequilibrio en el econsistema natural de la cordillera Septentrional, lo que está provocando menos lluvias y el calentamiento de los terrenos.

Aseguran que también la situación de corte de arboles está afectando seriamente las fuentes acuíferas de importantes arroyos, manantiales y pequeños ríos que nacen en la cordillera.

«Es penoso ver como en medio del bosque en la cordillera septentrional, se abren especio gigante para ser usado en agricultura y en otros de los casos en construcciones de casas capestres», expusieron al hacer un llamado a las autoridades de Medio Ambiente y a los sectores de la sociedad a ser vigilante para que este tipo de crimen contra la madre naturaleza no siga.

Se quejan que los propios agricultores en vez de convertirse en vigilantes y defensores de sus recursos naturales, se convierten en su propio verdugo, sin darse cuenta que están acabando con la flora y la fauna.

Manifiestan que para contrarrestar la tala de arboles en la cordillera se necesita de un plan de siembra de especies nativas y de educación orientado a que el hombre del campo viva aliado a la natualeza como parte de su existencia y sobrevivencia.

Narran que desde décadas en el maciso de la cordillera septentrional en la provincia Espaillat, no se conoce un plan de reforestación, que sustituya a los palos adultos, que mueren por el peso del tiempo.